En las Honras de Lope Félix de Vega y Honores extremos del doctor Juan Pérez de Montalbán: Francisco de Quintana y la oratoria fúnebre del Siglo XVII.

Se estudian los sermones que el novelista y poeta barroco Francisco de Quintana compuso en ocasión de la muerte de Juan Pérez de Montalbán y Lope de Vega. Se examinan estructura, temas y recursos retóricos, comparando el modus predicandi de Quintana con los modelos clásicos, los Textos Sagrados y los hábitos de la oratoria sagrada de época barroca. Un pormenorizado análisis de las dos oraciones permite desdibujar las diferentes técnicas empleadas: en el recuerdo del Fénix el orador se dedica más a lo que Quintiliano indicaba como docere et probare, o sea, enseñar, informar y convencer, a través de los episodios de la vida de un hombre que se retrata como un santo. En el sermón a Montalbán, en cambio, Quintana representa otra tipología humana presente en la Biblia: el pecador arrepentido. Para hacerlo privilegia otro parámetro fijado en la retórica clásica: el movere, emocionar al oyente y convencerlo de manera afectiva. Los dos sermones por su vocación doctrinal y didáctica, más que imitar la oratoria fúnebre del tiempo, revelan entonces la filiación de otros modelos: el sermón sagrado de un solo tema y la homilía como exposición de las palabras bíblicas. El afán del predicador por presentarse como divulgador de la doctrina católica tiene otra evidente consecuencia: el uso de una forma sencilla, depurada y sobria; un lenguaje llano que pretende contraponerse al estilo cargado que se difundió a partir de la consagración de Hortensio Paravicino. El rechazo de los excesos conceptistas determina, por tanto, la falta de muchos de los recursos «cortesanos» del ornato estilístico en boga en la época: las paronomasias, las estructuras latinizantes, los juegos de palabras, los equívocos verbales, etc. Los dos sermones demuestran tanto desde el punto de vista temático como estilístico, que el predicador tiene cierta reticencia hacia las novedeades que se habían impuesto en la oratoria del primer tercio del siglo, y manifiesta más bien su cecanía a las artes praedicandi del pasado.